Desde el año 2000, se celebra el Día Mundial del Corazón con el objetivo de concienciar a la población acerca de la importancia de las enfermedades cardiovasculares (ECV), así como para promover su control. La efeméride surgió por iniciativa de la Federación Mundial del Corazón y cuenta con los patrocinios de la Organización Mundial de Salud (OMS) y la Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura de las Naciones Unidas (UNESCO) Usualmente, las ECV causan la muerte de unos 17 millones de personas al año, lo cual representa casi la tercera parte de todas las muertes del mundo, y es probable que estas cifras aumenten en los próximos años. Esto será especialmente cierto en los países «en desarrollo», que todavía no han superado la ¨primera ola¨ de ECV (cardiopatía reumática y enfermedad de Chagas como resultado de infecciones) y que ya se encuentran bajo los efectos de la ¨segunda ola¨, la cardiopatía isquémica. La incidencia de enfermedad coronaria en estos territorios aumentará debido al incremento de laesperanza de vida y a la elevada prevalencia de factores inadecuados en el estilo de vida (tabaquismo, introducción de ¨comida rápida¨, menor actividad física, etc.)

A tomar en cuenta para una buena salud cardio vascular

1. Una alimentación rica en verduras y frutas frescas es uno de los pilares fundamentales de la salud. Según la Fundación Española del Corazón (FEC), las nueces son un alimento ¨estelar¨ para prevenir problemascardiovasculares gracias a sus altos niveles de ácidos grasos Omega-3, que protegen el corazón. También, se recomienda incluir en nuestras comidas vegetales, como el brócoli rico en ácido fólico, zinc y hierro y las legumbres, que favorecen unos niveles saludables de colesterol en sangre. Además, en una dieta cardiosaludable hay que reducir el consumo de sal y azúcar; así como los alimentos ricos en grasa de origen animal, productos precocinados y bebidas energéticas.

2. El sedentarismo es una de las principales causas de problemas cardiovasculares, por lo que practicar deportes de forma regular es fundamental para nuestro corazón, pero no todos lo benefician de la misma forma. Los más recomendados por los expertos en salud cardiovascular son los aeróbicos: correr, nadar, caminar a buen ritmo, ciclismo o, incluso, bailar. Todos ellos tienen un componente importante de resistencia y contribuyen al entrenamiento del aparato cardiovascular.

3. El tabaco y el alcohol son malos hábitos que repercuten de forma negativa en nuestra salud cardiovascular. De hecho, la Sociedad Española del Corazón (SEC) advierte que las personas fumadoras triplican el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares. Asi mismo, diversos estudios asocian el consumo regular de alcohol con el aumento de los niveles de sodio y calcio, que pueden favorecer la aparición de hipertensión arterial.

4. El estrés es uno de los problemas más comunes en nuestra sociedad y supone un factor de riesgo a controlar para prevenir problemas cardiovasculares. Los expertos de la FEC recuerdan que una persona con poco estrés tiene un menor riesgo de padecer un accidente cardiovascular. Las técnicas de mindfulness, el yoga y la meditación son opciones ideales para mantener el estrés controlado. Según un estudio, las personas con la tensión ligeramente elevada que tienen más riesgo de desarrollar hipertensión- consiguen reducir su presión arterial con la práctica de una hora diaria de yoga.